Este es el son sin son, con razon del irrasocinio, ametrallado y depurado en el lenguaje imperfecto del furor; del que ni escapo yo y menos otros, ya late y muy acelerado el corazon, va devaneando y lamentando los estados euforicos que dan cuando el sol sale a reemplazar la oscuridad, a cuenta dientes te digo un sobrio si, en voz baja para que no lo escuchen mis neuronas y me atormenten con un dolor de cabeza en castigo a mi terquedad y atrevimiento
ALEXANDER GUZMAN